La frontera entre Perú y Bolivia amaneció militarizada este domingo como parte de las acciones de control contra la propagación de coronavirus (Covid-19) entre ambos países. En el distrito fronterizo de Desaguadero al sur de Puno, el Ejército desplegó 16 militares, todos protegidos con sus mascarillas.
Los uniformados se sumarán a las acciones de control epidemiológico que implementó el Ministerio de Salud en el puente internacional que une a ambos países.
En el puesto de control de Kasani, en la provincia de Yunguyo, también se instalaron militares con sus respectivos barbijos. Similar fue el panorama en Tilali, provincia de Moho, frontera con el hermano país del altiplano.
Los militares se apostaron desde muy temprano. Con su presencia advirtieron que el gobierno está tomando todas las medidas necesarias para controlar la pandemia en las zonas de frontera.
No se cerró la frontera entre ambos países, pero personal de Migraciones informó que la afluencia de turistas bajó considerablemente.
Bolivia también implementó sus propios mecanismos de control. Nadie ingresa ni sale de Bolivia, mientras no se someta a diversos controles.
La Dirección Regional de Salud de Puno informó que los hospitales de Puno y Juliaca cuentan con ambientes de aislamiento para pacientes que presenten los síntomas del Covid 19. Aunque los espacios establecidos no cuentan con la implementación necesaria, la decisión más drástica será la cuarentena de la persona en caso que arroje diagnóstico positivo.